Vejeces Bolívar, espacio de acompañamiento y contención

10/11/2025 - Carla Farina dirige un espacio destinado a adultos mayores destinado a la terapia, el encuentro social y la creación de lazos. “La vejez es un proceso dinámico en continuo movimiento”
Por Melina Gómez
Carla Farina es técnica superior en acompañamiento terapéutico y trabaja con adultos mayores desde su taller lúdico cognitivo donde, a través de diferentes propuestas, estimula las funciones cognitivas, la autoestima, redes de pertenencia social y el buen vivir.

Estudió la tecnicatura en Bolívar, luego continuó su formación en La Plata y, al hacer las prácticas en un centro de día de adultos mayores, “me enamoré del trabajo con personas mayores, ahí conocí que me apasionaba”, asegura. Al volver a vivir a la ciudad, sabía que se quería dedicar a esto, en principio inició el proyecto con una compañera y luego siguió sola.
En marzo de 2021 creó Vejeces Bolívar, una propuesta preventiva con modalidad de taller, pensada para que las personas mayores “exploren sus múltiples potencialidades a través del juego”. Así, estimulan las diferentes funciones cerebrales, también el trabajo en grupo y el encuentro social como promotor y protector para mantener una vida social activa.
El taller lúdico marca la importancia del juego para la profesional que lo define como “una herramienta terapéutica muy valiosa donde se estimulan las diferentes funciones cognitivas e invita la socialización”. A su vez, sostiene que “la vejez es un proceso dinámico en continuo movimiento y las personas mayores tienen derecho a la recreación, al esparcimiento, como lo establece la Convención Interamericana de Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores”.
En ese marco, nació el espacio destinado a las y los adultos, para que se acerquen y se encuentren con otros pares, hagan nuevas redes, construyan nuevos vínculos y se diviertan. “Considero que es enriquecedor, he tenido siempre bastante buena repercusión”, indica su creadora.
Además, gracias a los juegos que propone Carla en cada encuentro, se estimulan las capacidades cerebrales como la atención, la memoria, el lenguaje, la escritura, el razonamiento, y comparten un momento de intercambio grupal. “Mi mayor motor es poder acompañar al proceso de envejecimiento como otra etapa más del ciclo vital porque la persona mayor tiene deseos, proyectos, tienen ganas de salir”, afirma.
Los encuentros son semanales, de dos horas, y la acompañante aporta las propuestas y los recursos materiales. Al llegar una persona nueva, le realiza una entrevista para conocer cuáles son sus gustos, sus intereses. “Siempre lo voy armando en grupo, en equipo, hacemos cosas que a todos les sea de interés y soy flexible, no mantengo una estructura rígida de taller sino que voy proponiendo, jugamos, cambiamos. Sí tengo un orden de actividades, de lo que vamos a trabajar y cuál es el objetivo del encuentro, si es la escritura, el lenguaje, el razonamiento, pero siempre de acuerdo a los gustos de cada uno, que sea enriquecedor y valioso para todos”, explica.

A partir de los 65 años, quienes se interesen en formar parte del taller que es preventivo y “no tiene que haber una patología o un diagnóstico, sino alguien que quiera salir, juntarse en grupo, divertirse, está invitado y será bien recibido”. Además, si alguna persona tiene alguna señal de pérdida de memoria, por ejemplo, puede participar para entrenar la estimulación cognitiva.
Las vías de contacto con Carla son las redes sociales, se encuentra como Vejeces Bolívar en Instagram y Facebook y el número de teléfono es el 221 5076677. Cabe mencionar que los encuentros tendrán un cierre en diciembre y se retomarán en marzo de 2026.
Dentro de las actividades previstas en el taller se encuentran también las salidas grupales y festejos de cumpleaños de las y los participantes. “Hemos hecho salidas a merendar, al parque, festejamos los cumpleaños de los concurrentes y dejo el espacio para la merienda y el encuentro de diálogo que es importante. Así intercambian, hacen lazos, porque mi mayor interés es que continúen los lazos sociales fuera del taller, que se inviten a salir y hagan nuevos vínculos, amistades”, dijo por último Carla.
A su vez, la profesional atiende a personas individuales en sus domicilios para trabajos más específicos.


